Antonio Soto Alcón
EL MEDITADOR DEL TIEMPO
Colección: Graffiti
ISBN: 978-84-948230-2-2.
NºPágs:134. Peso:199 grs. Medidas:13,5 x 21,5 cm.
Encuadernación: rústica con solapas.
C/IVA 14 € / S/IVA 13,46€
ANTONIO SOTO ALCÓN, nace en Librilla (Murcia) en 1952. Poeta y pintor.
Ha participado en diferentes grupos, revistas y antologías, tanto en narrativa como en poesía. A lo largo de su trayectoria ha recibido numerosos premios literarios: III Premio de poesía “Miguel de Cervantes” Armilla (Granada), con el libro En aquellas islas del alma, 1998. Mención de Honor “Premio Internacional Antonio Machado” Colliure (Francia) con el libro: Desde mi ventana, 1999. X Premio de Poesía Ciudad de las Palmas de Gran Canaria, con el libro: El libro de los espejos, 2002. II Premio de poesía “Dionisia García” Universidad de Murcia, con el libro: Todas las mañanas se asoma un ángel a mi ventana, 2002. XXI Premio de poesía “Antonio Machado” Ayuntamiento de Sevilla, con el libro: También en primavera mueren los cisnes, 2002. Ha publicado: Lolitas, 1999. Todas las mañanas se asoma un ángel a mi ventana, 2002. El libro de los espejos, 2003. El origen del mundo, Antología, 2004. También en primavera mueren los cisnes, 2004. Pubis Púber, 2011 Pictografía. La sombra de Arthur, 2015.
EL MEDITADOR DEL TIEMPO es un libro variado en cuanto a sus temas, pero íntegro, compacto en cuanto a su estilo y tonalidad, que es, en el fondo, lo que siempre cuenta. Por lo que conserva esa unidad interna que todo buen libro debe mantener intacta de principio a fin. La muerte, junto con el amor, en todas sus variedades, incluida la más frívola y sinvergonzona, que es marca de la casa, es el asunto dominante en estas exquisitas páginas. No pasan inadvertidos esos epitafios que incorpora —sean auténticos o inventados, qué más da—, porque nos recuerdan a aquellos otros, ya casi olvidados, recogidos por Ramón Gómez de la Serna en su libro Los muertos, las muertas y otras fantasmagorías. Sólo que Antonio ya pertenece al siglo XXI y ha visto, como el replicante de Blade Runner, arder naves más allá de Orión.
José Belmonte